Anticoncepción quirúrgica o esterilización de perros y gatos
La forma más sencilla y menos eficaz, que por desgracia hay que admitir, de prevenir el embarazo en una perra o una gata es el método natural. En el caso de una perra, consiste en no dejar que ningún perro se acerque a ella durante el periodo de celo. Una gata necesita estar encerrada entre cuatro paredes y vigilada para que no se cuele por una puerta o ventana entreabierta. Los gatos machos no castrados, mantenidos en un piso, considerándolo como su coto de caza, marcan los muebles y las paredes.
Estos y otros muchos problemas son conocidos por los propietarios de muchos perros y gatos. Es una pesadilla intentar dormirse con los gemidos guturales de un gato que languidece o perseguir a una perra durante su celo. Por lo tanto, respetando nuestro tranquilo sueño, vale la pena considerar el tratamiento hormonal o la esterilización o castración de nuestras mascotas.
Esterilización de animales
La castración es la extirpación completa de los órganos reproductores de un perro hembra o macho. La esterilización, en cambio, consiste en cortar las trompas de Falopio o los conductos deferentes, pero permite conservar todos los caracteres sexuales del individuo. El procedimiento más común hoy en día es la castración, que se realiza con anestesia general.
En el caso de las hembras , consiste en afeitar el abdomen, hacer una incisión en las capas abdominales y luego extirpar los órganos reproductores junto con el útero. En los machos, el procedimiento es mucho más sencillo. Los testículos se extraen haciendo una incisión en la bolsa escrotal y ligando el cordón espermático. La incisión se cura en 3 a 5 días. Este procedimiento suele parecer cruel o demasiado radical, pero es el más cómodo para la dueña y, hay que admitirlo, el más eficaz para evitar embarazos no deseados.
¿Cuándo realizar el tratamiento?
Los veterinarios realizan estas operaciones de forma rutinaria y el peligro de complicaciones en su caso es insignificante. En muchos países occidentales la esterilización se realiza entre los 3 y 6 meses de edad y entonces se denomina esterilización pediátrica. En general, ante el temor de que se produzcan trastornos del crecimiento y alteraciones hormonales y del desarrollo importantes, se recomienda realizar la esterilización quirúrgica después de completar la maduración sexual o incluso después del primer celo.
Ventajas
La esterilización reduce la agresividad de los machos y elimina el problema del olor desagradable asociado al marcaje del territorio por parte de los gatos machos. Este procedimiento, según los veterinarios, también puede prolongar en muchos casos la vida de los machos, sobre todo los que están más apegados a la casa. También elimina el peligro de cáncer de útero o de glándulas mamarias.
Desventajas
Desgraciadamente, los animales castrados pierden por completo sus características sexuales y son completamente dependientes de su dueño para su cuidado. Si se les deja sueltos, los gatos en particular pueden ser atacados por sus compañeros como hermafroditas. Al igual que con la anticoncepción farmacológica, los animales castrados ganan peso. El aumento de peso se debe a los cambios hormonales en el cuerpo, que además disminuyen el metabolismo.
El apetito de estos animales puede aumentar hasta un 30% y las alteraciones hormonales reducen la actividad y la vitalidad naturales del animal, lo que se traduce en un menor consumo de energía, de ahí el aumento de peso. La obesidad en gatos y perros puede causar diabetes o cojera. Otro efecto secundario de la anticoncepción quirúrgica es la incontinencia urinaria, causada por niveles insuficientes de estrógenos en los animales castrados. Los cambios hormonales resultantes de la castración también provocan un cambio en el pH de la orina, que a su vez puede provocar cálculos en la vejiga
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